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Comer también forma parte de viajar y, en mi opinión, ningún viaje está completo sin probar la gastronomía del lugar que se visita. Nos puede gustar más o menos, pero forma parte de la cultura y por tanto es algo imprescindible para conocer un país o región como se merece.
Hoy te quiero enseñar algunos de los productos más típicos de nuestra provincia. Si visitas alguno de estos lugares ya sabes… ¡no dejes de probar sus delicias gastronómicas!
EL CABRITO DE JADRAQUE
Una visita a Jadraque no está completa sin ver su castillo y comer un buen cabrito asado. El cabrito de Jadraque debe su fama a que se asa en horno de leña y se sirve en cazuela de barro con abundante salsa. La receta de esta salsa o “breve” es uno de los secretos mejor guardados, pero sí sabemos que no faltan las hierbas aromáticas que tanto abundan por esta zona.
EL CORDERO DE LA ALCARRIA
Este manjar no es exclusivo de un pueblo, sino que lo encontrarás por toda la región y en particular en la comarca de la Alcarria. Al igual que el cabrito, se trata de una carne excelente producto de la tierra, y el horno de leña y la cazuela de barro son imprescindibles para darle un sabor de primera.
LAS MIGAS ALCARREÑAS
Migas hay muchas y muy buenas en España, pero las de Guadalajara van bien servidas de torreznos de cerdo, chorizo o panceta, y se acompañan de uvas. Como dice el refrán: “migas del pastor, cuantas más vueltas mejor”. No hay duda de que las migas son un plato contundente, pero todo un disfrute para el paladar.
PREÑAOS DE TAMAJÓN Y HORNAZO DE PASCUA
Los preñaos no son más que un chorizo metido en pan, algo muy sencillo pero que no deja de ser un bocado suculento. El hornazo de Pascua no se queda atrás, se trata de una empanada con diversas carnes en su interior como jamón, chorizo o incluso cordero.
MIEL DE LA ALCARRIA
Damos la bienvenida a la sección de postres y dulces típicos con uno de los buques insignia de nuestra provincia: la miel. Es la primera miel de España que se ganó la etiqueta de Denominación de Origen, y en su composición no pueden faltar las esencias de romero y espliego entre otras hierbas, lo que define su aroma y sabor tan especial.
PATAS DE VACA DE MOLINA DE ARAGÓN
Tras este nombre tan peculiar se esconde el dulce típico de Molina de Aragón. Se trata de un bizcocho con base de harina y huevos, recubierto de azúcar y relleno por una crema pastelera que quita el sentido y cuya composición es un secreto. Su corte sesgado recuerda a las patas de vaca, de ahí su nombre.
BIZCOCHOS BORRACHOS DE TENDILLA
Son muy típicos de Tendilla, pero también de la capital, y no pueden faltar en ninguna de sus pastelerías. Un buen bizcocho borracho tiene que ser una masa esponjosa compuesta por huevo, levadura, harina, agua, azúcar… y es imprescindible que esté bañado por ese almíbar tan característico hecho a base de agua, ron y, como no, la excelente miel de la Alcarria.
HARINOSAS DE SIGÜENZA
Como su nombre indica, son tortas hechas de harina, pero con sorpresa en su interior: están rellenas de uvas negras. En Sigüenza son todo un manjar, pero si vas a este precioso pueblo medieval tampoco te olvides de probar las yemas del Doncel.
No puedo dejar de mencionar otros productos típicos de la provincia de Guadalajara como el chorizo de Atienza, el queso de Hita, la morcilla de Molina o la trufa. Y para acompañar nuestro menú, ¿qué tal un vino D.O. Mondéjar o una cerveza Arriaca?
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