Sonando: My Way (Frank Sinatra)
Seguramente me falle la memoria, pero diría que ya son dos y pico los años que “Regaliz para dos” se publica, cada mes, en las páginas que tienes en las manos, o en la pantalla frente a tus ojos.
Estos días me dio por mirar al retrovisor de la aventura de escribir públicamente. Mi primera toma de contacto con el mundo de la publicación, por cierto, pero ya os aseguro que no será la última. Regaliz nació un poquito antes como blog personal, trascendió al papel de revista y, como cantaba Freddie, el show debe continuar. Habrá próximos pasos, nuevas etapas y en todas ellas me veréis equipada con papel y boli o con ordenador y gafas, una de dos. Oye, que las gafas me dan un aire de azafata del 1, 2, 3 que ni tan mal, ¿sabéis?
El caso es que, haciendo balance del periplo de marras, descubro que Regaliz me ha dado tanto. En primer lugar, necesitaría escribir un post especial solamente con los comentarios, respuestas, impresiones, percepciones, críticas y palabras bonitas que me habéis regalado durante todo este tiempo. Desde personas que se han sentido identificadas con lo leído, otras tantas que han llorado, reído, o que han sido inspiradas, hasta personas que se han sorprendido de esta faceta mía (¡pero si yo ya escribía dentro del vientre de mi madre!); gente que me confiesa llevarse la revista para leer Regaliz en su casa, o incluso quienes me leen desde el anonimato y en el desconocimiento por mi parte, y que después, por causalidades de la vida (que no casualidades, ya sabéis), nos descubrimos como escritora y lector/a, nos ponemos cara, yo me sonrojo porque nací con la misma habilidad para la escritura que para la timidez, y todos tan contentos. Especialmente la que suscribe, disculpad si mi reacción en esas situaciones se parece más a la de un avestruz escondiendo la cabeza bajo tierra… Estamos trabajando en ello.
También sé que algunos/as me leéis desde el silencio y apenas recibo información al respecto. No pasa nada. También escribo para vosotros, porque Regaliz nació desde la calma, la quietud y el silencio, aunque irrumpiera con el título rebelde de “La Anti-blogger”. De hecho, probablemente yo sería una de los vuestros.
Sabed que Regaliz es mío, es tuyo, es vuestro. Es de todos. De los que os emocionáis con los relatos, de los que os veis reflejados en ellos, de los que esperáis ansiosos el próximo, de los que me comentáis y de los que no lo hacéis, de los que lo buscáis y de quienes lo encontráis sin quererlo (para estos, concretamente, tengo un mensaje: ¡en realidad lo queríais tanto que el universo no tuvo más remedio que ofrecéroslo!)
Gracias por compartir Regaliz conmigo: sois el uno que hace falta para el dos. Gracias a Urban Style por hacerlo
todavía más vuestro; por las felicitaciones directas e indirectas, por las muestras de cariño y por los buenos deseos. Gracias. A veces me siento abrumada y otras pienso que se trata de un sueño, pero algo debo estar haciendo bien, eso es cierto.
En el fondo solo soy una chica que escribe. A mi manera.
Pronto más regaliz para dos, amigos.
URBAN Style signature: Leticia San Andrés
Suscríbete a la newsletter
No te pierdas nada de los contenidos que publicamos a diario, ahora Urban Style en tu correo.