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Así con estas palabras define Alexandra la esencia de Florentina, el negocio familiar que regenta junto a su pareja y su suegra en Guadalajara. Con una amplia experiencia en hostelería, los tres han unido sus conocimientos y saber hacer para poner a disposición del público alcarreño una cocina a la altura de cualquier restaurante Michelin.
¿Qué os llevó a emprender un negocio como este en Guadalajara?
Florentina lo forman María del Carmen Gilaberte, su hijo Daniel Esteban y yo, Alexandra Arellano, que soy su nuera. Carmen lleva años formando parte de la hostelería de Guadalajara. Anteriormente era propietaria de un bar de copas y con el apoyo y conocimiento de su hijo y el mío era lógico dar un paso adelante para abrir un restaurante. La idea de emprender un negocio estaba presente desde hacía mucho tiempo. El llevarlo a cabo en Guadalajara fue por Daniel y Mari Carmen, que son de aquí y querían traer algo nuevo a la ciudad.
Vosotros teníais una amplia experiencia en el mundo de la hostelería, ¿no es así?
Sí, cada uno en su campo. Daniel se fue a Madrid a estudiar cocina con Pedro Larumbe, después estuvo en Valencia, País Vasco y de vuelta a Madrid, con experiencia en restaurantes de 1 y 2 estrellas Michelin. Carmen, que es la responsable y propietaria, tiene 7 años de experiencia en hostelería, es la encargada del servicio en barra y salón. Y yo, que soy originaria de México, tengo más de 11 años de experiencia, 2 de ellos en el País Vasco, en restaurantes de 1 y 2 estrellas Michelin.
Y el nombre, ¿cómo surgió?
El nombre es en honor a la abuela de Daniel y madre de Carmen, que fue el germen de la hostelería en la familia ya que regentaba el bar del pueblo y una posada de cazadores en El Pobo de Dueñas.
¿Cómo definiríais vuestra cocina?
Cocina honesta y tradicional, pero modernizada y cuidada.
¿Qué predomina más en vuestro restaurante, la comida mexicana o la alcarreña?
De momento la cocina alcarreña y española, pero en un futuro pensamos ampliar la empresa y abrir una taquería.
En vuestro restaurante dais mucha importancia a lo que se denomina producto de cercanía, ¿por qué?
Apostamos por el producto de calidad, ya que recibimos pescados y mariscos que no son de aquí, al igual que algunas de las carnes, que son vascas. Sin embargo, utilizamos la caza y productos locales, como la miel, la lavanda, el romero y las setas, para apoyar a los productores y dar a conocer los productos buenos de la región. De esta manera se ayuda dos veces, a la comunidad y a nosotros, para, de alguna manera, construir una provincia gastronómica más fuerte y atraer público externo.
¿Cuál es vuestro plato estrella?
Definitivamente las croquetas, que son totalmente artesanales y los torreznos, que nos los traen de Hita.
Cuéntame qué es el pintxopote que celebráis cada segundo jueves del mes.
El pintxopote es una tradición vasca. A partir de las 20h se monta la barra con una variedad de 15 pintxos al estilo de San Sebastián. Se crea un ambiente informal, económico con una oferta gastronómica divertida y diferente.
Al margen de este restaurante, ¿tenéis algún otro proyecto en mente?
Como comentábamos anteriormente, queremos ampliar la empresa, una taquería, quizá una cafetería también, el futuro dirá. De momento estamos enfocados en Florentina.
Restaurante Florentina
C/ La Barca, 5 Tlf.: 949 03 43 39
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