¿Cómo nos protegemos para que toda nuestra información no se pierda?
Poco a poco nos estamos convirtiendo en “Diógenes de los datos”: Lo guardamos todo, aunque ya no nos haga falta. Esto genera un exceso de almacenamiento, que va agotando nuestros recursos, y nos da la falsa sensación de que tenemos muchos Gigas de valiosos datos.
Cómo nos protegemos para que toda nuestra información no se pierda, pues en el 90% de los casos de ninguna manera. En nuestra tienda, llevamos años preguntando a nuestros clientes si realizan copias de seguridad. Y la respuesta siempre es la misma: “No la tengo, pero la voy a hacer”. Parece más un propósito de Año Nuevo que algo que nos pueda salvar de un disgusto. Otros nos comentan que no saben cómo se hace, y muy pocos se preocupan realmente por sus datos y la realizan regularmente.
Hay que tener claro un concepto vital: se llama copia de seguridad porque es un duplicado de un archivo. Mucha gente comete la imprudencia de eliminar el fichero del ordenador, o bien porque no tiene espacio suficiente, o porque cree que sin los datos el ordenador va a ir más rápido. Pero es un gran error, porque ya no tenemos un respaldo.
¿Dónde debemos guardar nuestros duplicados si nuestros datos están en un ordenador? Principalmente en dispositivos externos: pendrives o discos usb. También en cd´s o dvd’s y en la “nube” a través de plataformas de almacenamiento. Todo depende del volumen de datos a salvar.
¿Pero, qué debemos hacer antes de realizar nuestra copia? Lo más importante es tener muy bien ordenados y agrupados nuestros datos. Esto nos facilitará mucho la copia de seguridad. Lo recomendable es tener una carpeta principal y dentro de ésta crear las nuevas carpetas con fotos, videos, música,… Si usamos Windows, tendremos una carpeta de usuario, donde generalmente estarán todos nuestros archivos. Es importante no crear carpetas o ficheros fuera de esta carpeta principal, porque al realizar la copia tendremos que buscar datos por más sitios, y alguno puede que se nos quede sin salvar. Una vez tengamos nuestra estructura de datos, convendría saber cuánto espacio nos ocupa, y eso determinará el soporte utilizar para nuestra copia.
Para la mayor parte de los usuarios, nosotros recomendamos los discos duros externos usb ( o pendrive en caso de que sean pocos datos). El mejor método es copiar completa la carpeta principal al dispositivo externo y luego renombrarla en el dispositivo externo con un formato tipo fecha: “090217”. Esto nos indicaría que esta copia se realizó el 9 de febrero de 2017. Pasados unos días realizaremos el mismo proceso, y renombraremos la nueva carpeta “240217”. Ahora tendríamos 2 copias de todos nuestros datos, siendo la del 24 de febrero la última y por tanto con todos los nuevos datos. Realizaremos este procedimiento conservando tantas carpetas como sea posible, hasta que se vaya a llenar nuestro dispositivo externo, momento en que empezaremos a borrar las más antiguas, para liberar espacio, y poder poner las nuevas copias. Con este método, el proceso tardará más tiempo en realizarse, pero no tendremos que pensar en que ficheros son nuevos o modificados, siempre tendremos todo y además copias de ficheros que nos gustaban más sin los cambios posteriores.
Para usuarios más avanzados, se pueden generar copias incrementales o programadas a través de aplicaciones especiales de copias de seguridad. Y para usuarios que quieren trabajar en varios dispositivos, existen las plataformas de almacenamiento en la nube: Dropbox, Mega, Drive,… En ellos podemos hacer copia de nuestros datos, pero hay que saber programarlos bien, ya en general no hacen copia de seguridad, sino una sincronización de nuestros datos.
Por Alfonso Robles