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Muchos consideran al café como un imprescindible de su día a día y otros, sin embargo, lo entienden como un producto claramente perjudicial para la salud. Lo cierto es que este producto genera amor y odio a partes iguales y ha provocado un debate casi eterno acerca de la conveniencia o no de su inclusión en nuestra dieta diaria.
Para averiguar qué hay de verdad en las populares leyendas urbanas que le confieren bondad o maldad a partes iguales, en Urban Style recurrimos a la opinión de los expertos.
Eso sí, antes de analizar en detalle cuáles son los beneficios o inconvenientes del café, es importante destacar que, como sucede en la mayoría de los casos, todo nutriente consumido de forma razonable no tiene por qué generar un perjuicio en nuestro organismo.
FALSOS MITOS
Una de las primeras cuestiones negativas en torno al café es que altera el sueño. Según informa la Federación de Cafeteros, la única verdad es que la cafeína (uno de los componentes del café) incrementa nuestro nivel de alerta y atención, mejora tareas de vigilancia, reduce la fatiga e incrementa la agilidad mental.
Así, aunque muchos lo relacionen con el insomnio, lo cierto es que, ingerido a una hora prudente del día, puede convertirse en nuestro mejor aliado. Tampoco es del todo cierto que el café genere adicción.
Los últimos estudios científicos, según asegura la misma fuente, aseveran que no se ha demostrado que el sistema central desarrolle una determinada tolerancia a los efectos de la cafeína. De este modo, las personas que toman café a diario no necesitan ingerir cada vez dosis más altas para satisfacer su apetito. Las dosis suelen ser constantes en los consumidores de café.
Junto a estos más comunes, tampoco son del todo ciertas las voces que aseguran que causa infertilidad, algo totalmente descartado por los investigadores de Universidades tan relevantes como Harvard.
Tampoco es verificable que produzca hipertensión arterial (Según el Instituto Nacional de la salud de los EEUU), ni tampoco aumentaría el riesgo de enfermedad cardiovascular.
BENEFICIOS DEL CAFÉ
Pasando al apartado de las bondades del café, según varios estudios farmacológicos lo cierto es que, ingerido con moderación, el café puede ser beneficioso para el organismo.
Según un trabajo científico realizado en Corea del Sur, el consumo moderado de tres tazas de café al día se ha relacionado con la disminución en el riesgo de calcificación de la arteria coronaria, previniendo así enfermedades cardiovasculares.
Otro de los aspectos beneficiosos del café se relaciona con sus efectos sobre el cerebro. Además de ponerlo en marcha, el café previene determinadas enfermedades neurodegenerativas. Estudios recientes han demostrado que las personas que han consumido café regularmente tienen menos posibilidades de padecer enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson (en concreto un 60%).
Pero lo más plausible del café son sus cualidades nutritivas. Fuente de antioxidantes (una de las principales en occidente según el CSIC), aporta importantes nutrientes como la vitamina B5 y B12, potasio o magnesio. Junto con este relevante aporte, debemos destacar que el café, además es un buen quemagrasas. Eso sí, acompañado siempre de una dieta equilibrada. ¿Alguien da más?
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